- Érase una vez un hombro muy grande sobre el que llorar, sin nadie detrás. Sin problemas ni miedos propios. Capaz de sostener el mundo entero sin dejar escapar ni una queja, ni una lágrima.
- Deja ya de fantasear, esas cosas no existen
- ¿No, verdad? Entonces ¿por qué me sigues tratando igual?
me encanta, aunque no sé si lo he entendido...:s
ResponderEliminarT.T
ResponderEliminarMucho que decir y no me sale nada. Mucho que llorar y no me sale nada.. u.u