lunes, 5 de abril de 2010

Pérdidas


Perdóname. Fui una imbécil. Quizá lo sigo siendo. No supe mantenerte a mi lado, te aparté de mi camino con orgullo e indiferencia. Te alejé con mi silencio y me escondí de tus abrazos. Mi frustración era vano espejo de mis miedos. Miedo a ser débil y a sentirme insegura, a arriesgar demasiado y perderlo todo, a quedar destrozada. No sabía que ya todo lo había comprometido, que era algo que no podía controlar. Mi corazón se fue contigo dejándome vacía. Desaparecieron de mi boca palabras cariñosas. Mis labios secos y agrietados se llenaron de palabras vacías y silencio. Sólo quedaba rabia en mi interior. Rabia por perderte. Rabia por ser la única culpable. Rabia por no intentar evitarlo. Ahora la melancolía sustituye mi orgullo y puedo ver lo horrible de mi pérdida. Ahora solo me quedan recuerdos que se disipan cuando más los persigo. Ahora sigo aspirando fuertemente buscando en el aire tu aroma… y lo encuentro vacío…


Quizá algún día tu sonrisa desaparezca de mi pensamiento. Quizá algún día no recuerde la calidez de tu mirada ni la suavidad de tus labios. Quizá, y sólo quizá, consiga olvidarte.

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1 comentario:

  1. Me matas... (a bien, por supuesto!)
    (deberias poner tambien por aqui tu "inspiracion" =P)

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